Ya son 18 días que Mateo entró a nuestras vidas y se ha adaptado bien a su nueva familia perruna y a nosotros. Es bastante cariñoso y hace unos días ya comenzó a levantar la pata. Pensaba que sería más difícil quitarle la agresividad a la hora de comer pero no fue así.
El ahora conoce su lugar y espera sentado a que le ponga su plato para alimentarse. Ayer precisamente observé unas croquetas por fuera de su plato mientras comía y las levanté y el no hizo intento alguno de morderme.
Le gusta mucho que le acaricie el cuello y la cabecita. Se para en dos patitas y recarga su cabeza en mi rodilla algo ladeada para que le haga cariños.
Es un perrito muy sociable y nada peleonero, pero si se sabe defender. Los primeros días Bruno que es uno de mis perritos Alfa quiso imponérselo pero Mateo le marcó un límite, le peló los dientes y le gruño. Bruno al menos hizo cinco intentos más y al final se dio cuenta que no podría hacerlo así que ya desistió de molestarlo.
Su relación con todos los perritos es bastante buena, sus compañeros de juegos son Pippa, Benito, Teôdor, Macarena, Woody y Wendolyn. Se corretean muchísimo por el jardín y se divierten ( En el vídeo se corretea con Woody ).
Con Pippa que también es French Poodle ha resultado una relación especial, tanto que están enamorados. Juegan mucho juntos, se besuquean y se bañan mutuamente y de unos días a la fecha hasta duermen juntos.
En varias ocasiones Pippa se queda dormida practicamente encima de él y el no protesta. Es tan bonito verlos contentos y es que es notorio que hay amor del bueno entre ellos.
Esta imágen es de esta noche del 05 de Noviembre 2012 Pippa mimando a su novio Mateo y el dejándose querer. |
Así que como ven tenemos romance en casa. Proximamente les platicaré como evoluciona este naciente amor perruno.